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Raviolis caseros de carne con salsa de tomate

Raviolis caseros de carne con salsa de tomate

Un plato que no tiene edad, que se empezó a hacer hace siglos y se hará durante otros muchos, que a todo el mundo gusta y que te hará quedar como el mejor de los anfitriones: los raviolis caseros de carne con salsa de tomate. Un acierto garantizado.

INGREDIENTES

preparación

INGREDIENTESINGREDIENTES

Para la masa:

Para el relleno:

  • 500 grs de carne picada
  • 1 diente de ajo
  • 1 cebolla
  • 1/2 pimiento rojo
  • Pimentón picante de la vera al gusto
  • Orégano al gusto
  • Aceite de oliva virgen extra Cornicabra
  • 300 grs de queso mozzarella rallado

Para la salsa de tomate:

  • 4 tomates
  • 1 cucharadita de orégano
  • 1 cucharadita de albahaca
  • Azúcar al gusto
  • Pimienta negra recién molida al gusto
  • Sal al gusto
  • Aceite de oliva virgen extra Cornicabra

 

INGREDIENTESpreparación

  1. Comenzamos por hacer la salsa de tomate, para lo que pelamos y picamos los tomates en trozos pequeños y los echamos en una sartén o cazuela al fuego con un poco de aceite de oliva virgen extra Cornicabra caliente. Agregamos el azúcar para contrarrestar su acidez y lo condimentamos con un poco de orégano, albahaca fresca picada, sal y pimienta negra. Damos unas vueltas, dejamos que hierva durante un par de minutos y bajamos el fuego al mínimo para que se haga poco a poco. Tardará en cocinarse la salsa de tomate alrededor de 30 minutos, tiempo en el que de vez en cuando le daremos unas vueltas.
  2. Por otro lado, colocamos una sartén al fuego con un poco de aceite de oliva virgen extra Cornicabra. Mientras se calienta, vamos a ir picando el diente de ajo, la cebolla y el pimiento rojo en trozos muy pequeños. Cuando el aceite esté caliente, añadimos las verduras, damos unas vueltas y dejamos que se pochen a fuego medio durante 5 minutos.
  3. Tras ese tiempo, echamos el pimentón picante, lo rehogamos un par de minutos y añadimos la carne picada. Condimentamos con un poco de sal, pimienta negra molida y orégano y le damos a todo unas vueltas para que se mezcle y se fría la carne. Lo mejor es ir aplastando la carne picada con un tenedor para que así nos quede suelta y no se formen grumos.
  4. Mientras el relleno se está cocinando, hacemos la masa mezclando en un cuenco la harina con la sal, la yema de huevo y el aceite de oliva virgen extra Hojiblanca. Incorporamos agua poco a poco hasta obtener una masa homogénea y que no se pegue entre los dedos. Hacemos con la masa una bola, la envolvemos en papel transparente y la dejamos reposar.
  5. Cuando la carne esté bien cocinada, la retiramos a un cuenco, le agregamos el queso rallado y lo mezclamos bien. Reservamos.
  6. Dividimos en dos partes iguales la masa y las estiramos hasta que queden lo más finas posible. Sobre una de ellas vamos poniendo pequeñas cantidades de relleno separadas entre sí unos dos centímetros.
  7. Mojamos con un poco de agua el contorno de los sectores que hemos rellenado, para que la masa se pegue al momento de sobreponer la otra parte. Colocamos encima la otra mitad de la masa estirada y cubrimos bien cada extremo de los raviolis, intentando extraer la mayor cantidad de aire posible ya que si quedase algo en su interior, el ravioli flotaría al cocerse y no se haría bien.
  8. Con ayuda de un cuchillo o cortapastas, cortamos los diferentes raviolis procurando hacerlos todos del mismo tamaño para que tengan el mismo tiempo de cocción.
  9. A continuación, ponemos al fuego una cazuela con agua, sal, una hojita de laurel y aceite de oliva. En el momento en el que rompa a hervir el agua, introducimos los raviolis uno a uno y cuando estos comiencen a flotar al cabo de 3 o 4 minutos, los retiramos con una espumadera.
  10. Colocamos los raviolis en platos, espolvoreamos por encima un poco de pimienta negra molida y los regamos con la salsa de tomate. Echamos un poco de aceite de oliva virgen extra y un poco de perejil fresco picado por encima, y ya podemos servir los raviolis caseros de carne con salsa de tomate.

Para la masa:

Para el relleno:

  • 500 grs de carne picada
  • 1 diente de ajo
  • 1 cebolla
  • 1/2 pimiento rojo
  • Pimentón picante de la vera al gusto
  • Orégano al gusto
  • Aceite de oliva virgen extra Cornicabra
  • 300 grs de queso mozzarella rallado

Para la salsa de tomate:

  • 4 tomates
  • 1 cucharadita de orégano
  • 1 cucharadita de albahaca
  • Azúcar al gusto
  • Pimienta negra recién molida al gusto
  • Sal al gusto
  • Aceite de oliva virgen extra Cornicabra

 

  1. Comenzamos por hacer la salsa de tomate, para lo que pelamos y picamos los tomates en trozos pequeños y los echamos en una sartén o cazuela al fuego con un poco de aceite de oliva virgen extra Cornicabra caliente. Agregamos el azúcar para contrarrestar su acidez y lo condimentamos con un poco de orégano, albahaca fresca picada, sal y pimienta negra. Damos unas vueltas, dejamos que hierva durante un par de minutos y bajamos el fuego al mínimo para que se haga poco a poco. Tardará en cocinarse la salsa de tomate alrededor de 30 minutos, tiempo en el que de vez en cuando le daremos unas vueltas.
  2. Por otro lado, colocamos una sartén al fuego con un poco de aceite de oliva virgen extra Cornicabra. Mientras se calienta, vamos a ir picando el diente de ajo, la cebolla y el pimiento rojo en trozos muy pequeños. Cuando el aceite esté caliente, añadimos las verduras, damos unas vueltas y dejamos que se pochen a fuego medio durante 5 minutos.
  3. Tras ese tiempo, echamos el pimentón picante, lo rehogamos un par de minutos y añadimos la carne picada. Condimentamos con un poco de sal, pimienta negra molida y orégano y le damos a todo unas vueltas para que se mezcle y se fría la carne. Lo mejor es ir aplastando la carne picada con un tenedor para que así nos quede suelta y no se formen grumos.
  4. Mientras el relleno se está cocinando, hacemos la masa mezclando en un cuenco la harina con la sal, la yema de huevo y el aceite de oliva virgen extra Hojiblanca. Incorporamos agua poco a poco hasta obtener una masa homogénea y que no se pegue entre los dedos. Hacemos con la masa una bola, la envolvemos en papel transparente y la dejamos reposar.
  5. Cuando la carne esté bien cocinada, la retiramos a un cuenco, le agregamos el queso rallado y lo mezclamos bien. Reservamos.
  6. Dividimos en dos partes iguales la masa y las estiramos hasta que queden lo más finas posible. Sobre una de ellas vamos poniendo pequeñas cantidades de relleno separadas entre sí unos dos centímetros.
  7. Mojamos con un poco de agua el contorno de los sectores que hemos rellenado, para que la masa se pegue al momento de sobreponer la otra parte. Colocamos encima la otra mitad de la masa estirada y cubrimos bien cada extremo de los raviolis, intentando extraer la mayor cantidad de aire posible ya que si quedase algo en su interior, el ravioli flotaría al cocerse y no se haría bien.
  8. Con ayuda de un cuchillo o cortapastas, cortamos los diferentes raviolis procurando hacerlos todos del mismo tamaño para que tengan el mismo tiempo de cocción.
  9. A continuación, ponemos al fuego una cazuela con agua, sal, una hojita de laurel y aceite de oliva. En el momento en el que rompa a hervir el agua, introducimos los raviolis uno a uno y cuando estos comiencen a flotar al cabo de 3 o 4 minutos, los retiramos con una espumadera.
  10. Colocamos los raviolis en platos, espolvoreamos por encima un poco de pimienta negra molida y los regamos con la salsa de tomate. Echamos un poco de aceite de oliva virgen extra y un poco de perejil fresco picado por encima, y ya podemos servir los raviolis caseros de carne con salsa de tomate.

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