Tortillas de maíz mexicanas

Ingredientes para 8 comensales

1/2 kg de harina de maíz blanco precocida
50 ml de aceite de oliva virgen extra Hojiblanca
7 grs de levadura química en polvo
375 ml de agua
Sal

1. En primer lugar, vamos a poner la harina de maíz blanco precocida en un cuenco al que le agregaremos el aceite de oliva virgen extra Hojiblanca, la levadura en polvo y la sal.
2. Seguidamente, agregamos el agua y amasamos con las manos hasta que se integre todo perfectamente formando una masa lisa. En el caso de que nos quedara una masa muy aguada le añadiríamos un poco más de harina y si por el contrario quedara muy dura entonces agregaríamos más agua. El agua deberá de estar tibia.
3. Tapamos la masa y dejamos que repose durante un mínimo de una hora en un lugar templado.
4. Pasado ese tiempo, dividimos la masa en porciones del tamaño de una pelota de golf más o menos, y les damos forma redondeada.
5. Colocamos las porciones entre dos láminas de papel transparente y las extendemos con la ayuda de un rodillo hasta que tengan unos dos milímetros de grosor y la forma de una circunferencia.
6. Luego, ponemos a calentar una sartén de fondo grueso, aunque tradicionalmente de hacían en un comal, untada con un poco de aceite de oliva para evitar que la tortilla se pegue.
7. Con la sartén bien caliente, ponemos nuestra tortilla de maíz encima.
8. En el momento en el que se empiece a despegar de la sartén, le damos la vuelta.
9. Cuando se despegue del otro lado, le damos otra vez la vuelta.
10. En cuanto veamos que se empiezan a hacer burbujas en la masa de la tortilla, es que ya está lista por lo que la retiramos de la sartén y la ponemos sobre un plato.
11. Repetimos esta operación tantas veces como tortillas hagamos, poniéndolas siempre unas encima de otras para que conserven el calor.
12. Las tortillas de maíz se conservan en un recipiente envueltas en un paño de cocina limpio para que continúen calientes, que no se endurezcan y se encuentren blandas a la hora de comer. Solo queda decidir con que se acompañan.